Especialistas en inyecciones de rodilla en Brooklyn, NYC

El dolor de rodilla puede afectar significativamente a su calidad de vida, dificultando incluso las actividades más sencillas. Cuando los tratamientos conservadores como el reposo o el hielo no proporcionan alivio, los tratamientos de inyección de rodilla realizados por especialistas certificados en el manejo del dolor pueden ofrecer una solución viable. Ideal para personas con artritis, las inyecciones de rodilla en NYC de Pain Physicians NY pueden proporcionar alivio temporal del dolor y mejorar la movilidad. Descubra un respiro muy necesario del dolor crónico de rodilla visitando una de nuestras clínicas de manejo del dolor en Brooklyn, Queens o Manhattan.

Candidatos ideales para las inyecciones contra el dolor de rodilla

En dolor de rodilla se vuelve intolerable y los tratamientos conservadores como el reposo o el hielo no consiguen aliviarlo, los tratamientos de inyección en la rodilla pueden ser una opción viable. Para quienes padecen artritis, estas inyecciones pueden aliviar temporalmente el dolor y mejorar la movilidad. Aunque no todo el mundo se beneficia de las inyecciones en la rodilla, pueden ser muy eficaces para determinadas personas.

¿Qué tipos de inyecciones de rodilla se pueden poner?

El centro de tratamiento del dolor de Pain Physicians NY proporciona diversas inyecciones para aliviar el dolor articular y facilitar la fisioterapia o los ejercicios para fortalecer los músculos que sostienen la rodilla. Su médico determinará la terapia más adecuada basándose en su historial médico, síntomas y hallazgos clínicos. Los principales tipos de inyecciones incluyen:

• Inyecciones de corticosteroides: Estos potentes fármacos antiinflamatorios e inmunosupresores actúan sobre los receptores nucleares de esteroides, alterando la respuesta inflamatoria e inmunitaria a múltiples niveles. Ayudan a reducir el enrojecimiento, la hinchazón, el calor y la sensibilidad en la articulación inflamada, mejorando la movilidad. Las inyecciones de corticoesteroides se utilizan habitualmente para aliviar el dolor moderado a intenso de la artrosis de rodilla, y suelen durar varios meses, aunque algunos pacientes pueden experimentar alivio sólo durante cuatro semanas.
• Inyecciones de ácido hialurónico: El ácido hialurónico, producido naturalmente por el organismo y presente en el líquido sinovial, actúa como lubricante y amortiguador en las articulaciones. Inyectarlo directamente en la rodilla puede restaurar temporalmente estos efectos, reducir la inflamación sinovial, proteger contra la erosión del cartílago y estimular la síntesis de ácido hialurónico del organismo. Estas inyecciones se utilizan a menudo para tratar la artrosis y pueden requerir una única inyección o una serie administrada semanalmente, según el caso.
• Inyecciones de plasma rico en plaquetas (PRP): Derivado de una muestra centrifugada de la sangre del paciente, el PRP contiene altos niveles de factores de crecimiento y moléculas biológicamente activas. Cuando se inyectan en la zona objetivo, las plaquetas ayudan a la cicatrización, reducen la inflamación, alivian el dolor, mejoran la función y facilitan la regeneración del cartílago. Las inyecciones de PRP se utilizan para desgarros tendinosos, lesiones musculares, dolores relacionados con la artritis, tendinitis y lesiones articulares. El procedimiento no presenta complicaciones importantes, y en algunos pacientes sólo tiene efectos a corto plazo, como dolor moderado, hinchazón y exceso de líquido alrededor de la articulación.
• Inyecciones de células madre: Las células madre, extraídas del tejido adiposo, la sangre o la médula ósea del paciente, pueden adoptar las propiedades de las células circundantes para reparar el tejido dañado. Estas inyecciones pueden suprimir la inflamación, disminuir el deterioro del cartílago y reducir el dolor de rodilla. El alivio del dolor con la terapia de células madre suele ser rápido y sigue mejorando con el tiempo, lo que ayuda a muchos pacientes a evitar o posponer la cirugía.
• Inyecciones de toxina botulínica: Comúnmente conocidas como Botox, estas inyecciones actúan bloqueando las señales nerviosas que provocan la contracción de los músculos, lo que puede ayudar a controlar el dolor. Cuando se inyecta en la rodilla, la toxina botulínica puede reducir los espasmos musculares y el dolor, aliviando afecciones como la artritis. Los efectos son temporales, suelen durar varios meses, y el procedimiento suele tolerarse bien con efectos secundarios mínimos.
• Inyección inversa (aspiración de líquido): Este procedimiento consiste en eliminar el exceso de líquido de la articulación de la rodilla, lo que puede ayudar a reducir la hinchazón y el dolor. La aspiración de líquido suele utilizarse para tratar afecciones como el derrame de rodilla, en el que se acumula líquido en la articulación debido a una inflamación o lesión. Al aliviar la presión dentro de la articulación, este procedimiento puede mejorar la movilidad y la comodidad. Se trata de un procedimiento relativamente sencillo y rápido con beneficios inmediatos, aunque puede ser necesario abordar la causa subyacente de la acumulación de líquido para obtener un alivio a largo plazo.

Procedimiento de inyección en la rodilla

Las inyecciones en la articulación de la rodilla pueden administrarse desde varios puntos alrededor de la rodilla, con rayos X y ultrasonidos que ayudan a colocar las agujas con precisión. Los abordajes habituales son superolateral, superomedial, anteromedial y anterolateral, cada uno de ellos con posiciones específicas para el paciente y direcciones para la aguja. El lugar de la inyección se marca y se limpia, con precauciones para mantener la esterilidad y minimizar las hemorragias, especialmente en el caso de pacientes que toman anticoagulantes. Puede utilizarse un spray frío para adormecer la piel antes de la inyección. El proceso completo sólo dura unos minutos. Se aconseja descansar las rodillas y abstenerse de hacer nada que pueda dificultar la recuperación tras las inyecciones en la rodilla. Después de la inyección, el dolor desaparece en uno o dos días.

Posibles riesgos y efectos secundarios de las inyecciones en la rodilla

Aunque en general se consideran seguras, algunos riesgos asociados a las inyecciones en la articulación de la rodilla son:

• Infección
• Sangrado
• Reacciones alérgicas
• Daños en los tejidos circundantes

Algunos pacientes pueden experimentar dolor temporal o hinchazón en el lugar de la inyección. En raras ocasiones, podría producirse una reacción a la sustancia inyectada. Su médico le explicará estos riesgos durante la consulta para asegurarse de que el procedimiento es adecuado para usted.

Cuando se trata de sus opciones de inyección de rodilla NYC, Pain Physicians NY ofrece varios tipos disponibles para ayudar a mejorar la movilidad y lograr una mejor calidad de vida. Si usted está luchando con dolor de rodilla y otros tratamientos han demostrado ser ineficaces, visite una de nuestras clínicas de manejo del dolor en Brooklyn, Queens o Manhattan para una solución a medida de los mejores médicos y especialistas en manejo del dolor.